Cierta tarde, iba conduciendo por la autopista a 140 km/h, otro vehículo, que venía detrás me pasó yendo él a una velocidad promedio de 150 Km/h, cuando esto ocurrió yo aceleré aún más, ambos íbamos a 160 Km/h y aumentando…
Pasado 5 minutos de esta “contienda” el otro vehículo bajó la velocidad, mucho más adelante yo también bajé la velocidad…
La fortaleza que importa, no es la que reacciona en un momento dado, sino, la que mantenemos constante y permanente en el tiempo.
¿Dónde iremos a parar, si se apaga Valderrama?.- preguntaba el Hombre Altruista
Hoy eso no me importa, le respondo
Abuelita, no baje la velocidad, todavía no…
Comentarios
Publicar un comentario