El Hombre Idiota niega su existencia, y esa continua negación es justamente el éxito de su existencia, Viva la redundancia exclama el Hombre Idiota y Viva mi inexistencia continua, luego, convencido de su normalidad va por allí callando cuando tiene que hablar y hablando cuando tiene que callar, la culpa nunca es mía se queja el Hombre Idiota, y se apena, y se preocupa, y sufre el Hombre Idiota, sufre por todos nosotros, porque la vida por alguna extraña razón nos hizo así, - pobres se lamenta de nosotros el Hombre Idiota mientras deambula por allí.
El Hombre Mentiroso ni siquiera niega su existencia, más bien la lamenta al mundo, ayúdenme suplica, mientras ensaya aquello de “mírame a los ojos y dime lo que ves” “yo nunca podría engañarte” “sabes muy bien que no soy así”… la historia dice que un día el Hombre Mentiroso se asomó al espejo y se espantó de su reflejo, asustado hechó al olvido su derecho a la oscuridad privada, -no puedo soportarla dijo, desde entonces ocupa los primeros puestos del día mientras ensaya aquello de “te juro que 2+2 son 5” sin siquiera pestañar.
El Hombre Resentido es el peor de todos, consciente de su existencia no se conforma hasta gritarla al mundo, un espectáculo vergonzoso es el resultado de ver como el Hombre Resentido reconoce como malo todo aquello que él no puede ser , todo aquello que él no puede tener y todos aquellos riesgos que él no puede correr, sin saberlo con definirse define también su ineptitud e incapacidad de vida… estoy resentido exclama el Hombre Resentido y ni siquiera el eco debería responderle.
Seré alguno de estos hombres, se preguntó alarmado el Hombre Altruista, y como toda pregunta que se echa al viento el viento se encarga de responder
-“Todos ellos” el viento respondió.
El Hombre Mentiroso ni siquiera niega su existencia, más bien la lamenta al mundo, ayúdenme suplica, mientras ensaya aquello de “mírame a los ojos y dime lo que ves” “yo nunca podría engañarte” “sabes muy bien que no soy así”… la historia dice que un día el Hombre Mentiroso se asomó al espejo y se espantó de su reflejo, asustado hechó al olvido su derecho a la oscuridad privada, -no puedo soportarla dijo, desde entonces ocupa los primeros puestos del día mientras ensaya aquello de “te juro que 2+2 son 5” sin siquiera pestañar.
El Hombre Resentido es el peor de todos, consciente de su existencia no se conforma hasta gritarla al mundo, un espectáculo vergonzoso es el resultado de ver como el Hombre Resentido reconoce como malo todo aquello que él no puede ser , todo aquello que él no puede tener y todos aquellos riesgos que él no puede correr, sin saberlo con definirse define también su ineptitud e incapacidad de vida… estoy resentido exclama el Hombre Resentido y ni siquiera el eco debería responderle.
Seré alguno de estos hombres, se preguntó alarmado el Hombre Altruista, y como toda pregunta que se echa al viento el viento se encarga de responder
-“Todos ellos” el viento respondió.
byrongio
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