"Abuelo, dónde está Dios Mi abuelo se puso triste y nada me respondió" Lo escuché siendo pequeño, lo volví a escuchar ahora ya grande, a veces mi padre lo recita todavía, buscando su letra no encontré más que recuerdos, así que me limito a transcribir mi recuerdo de aquel poema: - ¡Señor! por tu poder bendito te lo pide esta madre que esta viendo morir a su hijito y pa que le des la vida te ofrezco andar estas tres leguas de rodillas - Ruperto ¡vení! arrodíllate e implórale al Cristo de la quebrada... - ¡Señor! Yo soy un rudo paisano que a fuerza de mirar siempre pabajo no creo en mas poder que el de mis brazos, pero si tú Señor haces el milagro de salvármelo a mi hijo, te ofrezco mi bella majadita de veinte cabras blancas, también tengo mi vaca, también tengo mi mula y para Ti Señor tengo demás mi mano zurda si es que mi pobre fortuna no te es basta. La leyenda dice que el niño sanó... mas la serrana murió después de andar tres leguas de rodillas, por la montaña vagan dispe...